Títulos de las Hermandades y Cofradías (I)

La ampulosidad de los nombres es uno de los grandes arcaísmos que aún conservan casi todas las cofradías, desde aquellos lejanos tiempos de inmodestia en que la posesión y ostentación de adjetivos reportaba, además de prosapia, otros beneficios contantes y sonantes: el derecho a establecerse en un convento, privilegios civiles y eclesiásticos, reserva del derecho de admisión, etc.

Fervorosa: Este nombramiento es una concesión de la autoridad eclesiástica a una hermandad que haya destacado por unir a todo un barrio en una devoción e incentivar su piedad, o bien por la autenticidad de sus actos piadosos o por promover entre la gente el culto a alguna advocación concreta.

Pontificia: Es probablemente el título más rentable que han poseído las hermandades a lo largo de su longeva vida. La especial afinidad de una cofradía con cierto Papa ha sido recompensada tradicionalmente con esta condecoración, que no solía ir sola. En Zaragoza este título lo ostenta la cofradía de la Columna. Además, más temprano que tarde, dicha cofradía quedaba por lo general agregada (vinculada) a alguna de las basílicas más importantes: San Juan de Letrán, el Santo Sepulcro, San Pedro... con lo que compartía las gracias e indulgencias de éstas: reducción de pena en el Purgatorio, indulgencias plenarias, lograr favores...

Archicofradía: Hermandad surgida de la fusión de varias, con permiso eclesiástico para agregarse otras o bien pionera en el culto a alguna advocación posteriormente extendida. En Zaragoza la corporación de gloría de San Roque tiene este título.

Ilustre: que tiene o ha tenido hermanos de alta alcurnia y pretende emular su nobleza en todo cuanto hace. Las cofradías de la Columna, Nazarenos y Sangre de Cristo poseen este título.

Muy, Siempre, -ísima: antecediendo a un título o con el sufijo -ísima, significa que lo es en mayor grado que otras que también lo ostentan.

Real: concedido por el jefe de la Casa Real, por ser hermano. El título de Real lo ostentan en Zaragoza las Cofradías del Prendimiento, Columna, Resurrencción y Sangre de Cristo. También existe la variante de Imperial si ha sido concedida por un Emperador.

Sacramental: Aquella hermandad residente en parroquia a la que se reconoce como fin principal el culto al sacramento de la comunión. En 1790 El Consejo de Castilla, siguiendo la política de los Borbones Carlos III y Carlos IV, prohibieron todas las cofradías que no fueran Sacramental o de Ánimas en las parroquias. Las Hermandades con el título de sacramental, suelen llevar entre sus insignias un guión sacramental o estandarte de la hermandad con la que se fusionaron, y también suelen llevar cirios de color rojo. Es así mismo frecuente encontrar una custodia en sus escudos. Este año el capítulo general de hermanos de la Cofradía de la Eucaristía de Zaragoza decidió poner en marcha las pertinentes acciones para obtener el título de Sacramental

De Ánimas: Se encargan de ofrecer “misas” por las Ánimas Benditas o del purgatorio y debe haber una en cada parroquia.

Venerable: Por su virtud, así reconocida popularmente, o por haberla tenido en fama de santidad a alguno de sus miembros.

Antigua: Las más veteranas. En Zaragoza la possen las cofradías de la Columna, Nazarenos y Sangre de Cristo.

Primitivas: Las primeras en rendir algún culto o cumplir con cierta costumbre.

Humilde: Con voto de pobreza.

Relacionada con alguna orden:

• Franciscana o Seráfica: concerniente a la orden religiosa fundada por San Francisco de Asís, con voto de pobreza. Pueden tener a algún santo franciscano entre sus titulares.
• Dominica: concerniente a la orden fundada por Santo Domingo de Guzmán. Pueden tener a algún santo dominico entre sus titulares.
• Carmelita: concerniente a la orden carmelita. Pueden tener a algún santo carmelita entre sus titulares.
• Jesuita: concerniente a la orden de los Jesuitas. Pueden tener a algún santo jesuita entre sus titulares.
• Trinitaria: concerniente a la orden de los Trinitarios. Pueden tener a algún santo trinitario entre sus titulares.
• Servita: Vinculada con la Orden Tercera de Siervos de María.